Tic-tac,
nos susurra al oído.
Corre,
vive deprisa, sin detenerte mucho a pensar.
Su
fugacidad nos agobia, y es que avanza sin piedad. Nada ni nadie puede evitar
que nos alcance en la carrera de la vida. Oxida nuestro cuerpo y nuestra mente,
haciéndonos vulnerables. Nos hace sentir miedo e inseguridad.
Pero, ¿no dicen que si no puedes con tu enemigo, unirte a él es la mejor solución?
Es
por eso que debemos aliarnos con el tiempo. Vivir
cada instante, disfrutar de cada momento, porque llegará un día en que nuestra
cuenta atrás toque a su fin. El tiempo no dudará en adelantarnos, poniendo el
punto y final sobre nosotros.
Una
vez que aprendamos el significado de la vida aceptaremos, sin resignación,
nuestra condición de mortales.
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Enhorabuena Pablo por haberte dado cuenta que es necesario vivir intensamente cada momento. El tiempo pasa de forma inexorable. Es sabio haberlo descubierto.
ResponderEliminarNuevamente nos haces pensar.
Gracias
Gracias a ti. Me alegro de que haya hecho pensar.
EliminarQuerido Pablo, me encanta que con tu juventud tengas claro que es preciso vivir "sintiendo lo que se vive". El concepto de tiempo puede ser todo lo complejo que seamos capaces de complicarlo, y tan simple como comprender que es un invento de los humanos para organizar el presente en su carrera hacia el futuro. A pesar de su avance inexorable, hay momentos en los que el tiempo se detiene, es vencido sin violencia y lo acepta. Esos momentos de victoria sólo puede conseguirlos el amor. Espero que con esta breve oda entiendas lo que quiero decirte:
ResponderEliminarSoy del agua
Un atardecer de edad temprana
arrojé mi corazón a las aguas
cristalinas del inmenso lago
de tu recuerdo…,
sólo las ondas y la brisa miraron
como se hundía lentamente
en su camino al abrigo de los
tiempos…
así ha permanecido intacto
acompañando a las mareas
en su palpitar de sangre azul
enamorada…
por eso puedes sentirme
en el rocío de la mañana,
y cuando te lavas la cara,
o en cualquier tarde gris cuando el viento
acerca la lluvia tras tus pasos…
soy del agua que fluye, que brota
y desaparece, que espera eterna
en el remolino agitado donde desagua
tu vida, que baila bajo el agua calmada
que refleja tu imagen…
y que te observa paciente desde
la otra orilla del mar de tu risa, soy
del agua hoy, ayer, el mañana…
en el fondo del lago la edad no
tiene sentido.
Bueno Pablo, espero que continúes con tu labor de hacernos pasar buenos ratos con tu blog.
Hasta siempre.
Manuelo.
Por supuesto, seguiré escribiendo siempre que pueda, siempre que tenga alguna idea nueva que compartir. Y si lo que escribo hace pasar buenos momentos, estaré muy agradecido.
EliminarEn cuanto a la oda, creo que la he entendido y me encanta, es preciosa...
Gracias, de corazón.